Imagínate vivir en una casita de cristal, donde la luz y las vista al exterior sean magníficas. Seguro que después de imaginarlo lo primero que piensas es que si hace calor te vas a achicharrar y qué faena a la hora de limpiar esos cristales. Los nuevos muros de vidrio aíslan del frío, el calor, el ruido y son autolimpiables.
Permanece una rato más soñando, pero no cierres los ojos que tienes que hacer esta lectura, seguro que después de ella es lo próximo que vas a desear.
Cada vez más en el mundo de la arquitectura se está optando por hacer viviendas que tienen como protagonista el vidrio y gracias a la imaginación y al estudio del entorno, de las necesidades del propietario, de su estilo de vida, se están levantando proyectos espectaculares en cualquier rincón del mundo.
La importancia de la luz en nuestra vida
La luz natural nos hace sentir más vitales y dinámicos, es por esta razón por la que cada vez se utiliza más el vidrio como elemento arquitectónico y estructural. Es innegable que el uso de grandes ventanales aporta un plus estético y cualitativo a nuestra vivienda, pero también es cierto que ello requiere unos exigentes cuidados y mantenimiento. La limpieza periódica y la accesibilidad a todo el cristal son aspectos fundamentales. Te mostraremos una serie de consejos y recomendaciones que hay que tener en cuenta antes de optar por una casa de muros acristalados.
Gracias a los avances de las técnicas que se le aplican al vidrio y a la carpintería metálica, a día de hoy conseguimos viviendas que se abren al exterior, haciendo de ellas un lugar luminoso y en conexión con el entorno, haciéndolo protagonista de la decoración.
Muy lejos quedaron esas viviendas opacas, oscuras, con poca luz, ya que sus ventanas diminutas le impedían la entrada. Eso si, la función para la regulación térmica la hacían, acompañadas de esos enormes muros. Las casas con grandes muros de cristal son espacios alegres, pero también conllevan aspectos que no debemos pasar por alto.
Si optamos por el uso de grandes ventanales de vidrio para nuestra vivienda, hay ciertas pautas que debemos seguir, como algo fundamental, es elegir vidrios y materiales de calidad y reconocidos. Debemos informarnos bien de los diferentes tipos de vidrios existentes en el mercado y de sus ventajas e inconvenientes, ya que éste es un material delicado, posee escasa resistencia térmica y una alta conductividad.
Esto quiere decir que no ayuda a retener el calor en invierno, al tiempo que hace que tengamos que protegernos de él en verano también, con el consiguiente gasto energético y económico que ello supone de calefacción y aire acondicionado.
Pero, afortunadamente, el vidrio ha evolucionado mucho en este sentido y actualmente se pueden encontrar soluciones muy efectivas que reducen estas desventajas. El uso de un tipo de vidrio u otro dependerá en gran medida de la climatología del lugar, de la orientación de la vivienda o de la estancia, de la función y el uso que demos al espacio y del entorno de la vivienda.
El Catálogo
Vidrio con aislamiento térmico reforzado. Es un vidrio que aísla del frio y mantiene el calor interior de la vivienda. Haciendo que nuestro confort se eleve en invierno reduciendo así el gasto de calefacción y las molestas condensaciones. Posee un doble acristalamiento, con dos vidrios separados entre sí por una cámara de aire. Uno de los vidrios incorpora una capa de baja emisividad, que se suele colocar hacia el interior de la cámara de aire.
Vidrio con control solar. Aísla del calor porque provoca que los rayos del sol se reflejen hacia el exterior evitando el recalentamiento interior. De esta forma se mantiene la temperatura en el interior de la vivienda, disminuyendo el gasto en refrigeración.
Posee una capa tratada, normalmente con metales nobles, que en parte protege de la radiación solar. En función de la orientación del ventanal y de las temperaturas máximas que se alcancen en verano, se deberán considerar acristalamientos con mayor o menor control solar. Esto es particularmente necesario en claraboyas o tragaluces de gran superficie expuestos directamente a la luz natural.
Vidrio de seguridad. Aportan la tranquilidad de contar con un espacio seguro y protegido a la vez que luminoso. Existen principalmente dos tipos de vidrios de seguridad, el vidrio templado y el vidrio laminado.
El templado, en caso de rotura se fragmenta en trozos diminutos, con lo que se evitan cortes. El laminado incorpora uno o más films de plástico. Es más seguro ante una posible rotura ya que los trozos de vidrio permanecen pegados al film de plástico, evitando así tanto cortes como caídas al vacío. Ambos están diseñados para resistir fuertes impactos y presiones.
Vidrio con aislamiento acústico. Aíslan mejor del ruido exterior en comparación con un vidrio normal. Está formado por dos hojas de vidrio unidas por una lámina de plástico, especialmente concebida para reforzar el aislamiento acústico. Con la utilización de estos vidrios mejoramos el confort interior de la vivienda consiguiendo un ambiente más tranquilo y sereno.
Vidrio autolimpiables. Y aquí está el que muchos añoráis, está compuesto por un vidrio incoloro al que se ha incorporado una capa transparente de un material mineral fotocatalítico e hidrófilo, que realiza, junto con el sol y la lluvia, una función autolimpiante.
La suciedad que se deposita en el cristal se descompone con los rayos UV del sol a la vez que la lluvia elimina del vidrio la suciedad descompuesta. En el caso de que no llueva durante días y decidamos limpiar el vidrio manualmente, veremos que la suciedad es más fácil de eliminar. Este es el nuestro, el que cambiábamos en un periquete en nuestra casa, ¿A que si?
Y no solo a muros de cristal, ventanas y barandillas, lucernarios, claraboyas o tragaluz, para mantenerlos siempre perfectos.
Estas son las características principales de los vidrios, pero lo más interesante es que sepas que se pueden mezclar en combinaciones de dos o tres acristalamientos específicos para conseguir los vidrios adecuados a cada necesidad. Así que último que debemos tener en cuenta que las características de los marcos y las ventanas sean acordes al vidrio que habéis elegido.
Una vez estudiadas todas estas consideraciones, ya tienes toda la información necesaria para poder empezar a disfrutar de la luz natural y de unas magníficas vistas desde el salón de tu casa.
Esperamos que os haya sido útil el post «Casas de cristal. Arquitectura singular por el mundo» que nos escribe nuestra colaboradora Ángela Gómez. Recuerda inscribirte en nuestra newsletter para estar informado de todas las novedades de Obra Nueva en Córdoba y noticias relacionadas con el mundo inmobiliario. Quiero inscribirme ahora
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